Estamos en el año 1017. La condesa Ermessenda de Carcassona, que acaba de enviudar de su esposo el conde de Barcelona Ramon Borrell, le entrega a su hijo Berenguer Ramon I una documentación en la que se da fe de la existencia del castillo que hoy conocemos con el nombre de Castell de Burriac. En aquella documentación el castillo se llamaba Castell de Sant Vicenç y no fue hasta el año 1313 que aparece con el nombre de Castell de Burriac en un documento escrito.
Han pasado más de 1.000 años y el Castell de Burriac, ubicado en Cabrera de Mar, sigue presidiendo la comarca del Maresme desde lo alto de una loma de 400 metros de altitud. 1.000 años a los que hay que añadir muchos más si le sumamos el poblado ibérico que se halla a sus pies. Miles de años en los que la comarca del Maresme no ha perdido ninguno de sus atractivos y sigue siendo un lugar inigualable para vivir.
El Castell de Burriac está en ruinas, pero su estructura ha sido consolidada por lo que es posible visitarlo. La torre del homenaje, parte de las murallas y algunos muros han sobrevivido al paso del tiempo. Tan solo por las vistas ya merece la pena la ascensión. Para acceder hasta él hay más uno itinerario aunque el más asequible es el que empieza en el centro de Cabrera de Mar.
Podemos dejar nuestro vehículo en el parking situado sobre la Font Picant. Cruzamos la pista principal y seguimos un sendero que se corresponde con el antiguo camino de subida al castillo y que es el que utilizaban los vecinos del pueblo antes de que existiera la pista forestal. La subida es fuerte pero la haremos rodeados de encinas, pinos y todo tipo de arbustos mediterráneos.
El propio castillo, en lo alto de la cima, nos indica constantemente la dirección que hemos de seguir.
Una vez arriba tenemos una perspectiva espectacular de la costa del Maresme y podemos entender el porqué lo construyeron precisamente en este emplazamiento. Es un mirador excepcional. La excursión hasta el Castell de Burriac es ideal para realizarla con niños, aunque esos sí hay que vigilarlos en algún tramo. No sólo por lo asequible del camino sino por el atractivo objetivo final de la caminata.
Aunque lo que veremos ahora dista mucho del esplendor que antaño vivió esta fortaleza podemos hacernos una idea bastante aproximada de lo que fue a través de esta recreación.
Alrededor del mes de mayo se celebra en Cabrera de Mar la Festa de les Bruixes que, entre otras muchas actividades, incluye visitas teatralizadas al Castell de Burriac. Las Bruixes de Burriac son motivo de muchas leyendas.
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2 Respuestas a “El Castell de Burriac, un mirador excepcional sobre la comarca del Maresme”